Hoy en día no es difícil conseguir productos que sirven para limpiar y desinfectar el baño y la cocina, el problema es que muchas veces no sabemos cómo utilizarlos adecuadamente ni el daño que nos puede hacer un mal uso. Para evitar peligros al limpiar, conoce estos errores al usar productos para desinfectar la casa.
#1 Usar demasiado cloro
Si bien el cloro es muy útil para eliminar manchas y desinfectar, usar cantidades desmedidas es un error que puede perjudicar tu salud. El cloro es un químico muy fuerte y cuando se usa en grandes cantidades tanto los vapores como el líquido pueden irritar la piel y los ojos. Respirar esta clase de vapores puede irritar las vías respiratorias causando reacciones como tos, estornudos e irritación nasal. Las mucosas nasales y estomacales sufren de una fuerte irritación cuando este producto llega a estas zonas, así también la respiración puede ser afectada causando una hiperactividad pulmonar. Es común que al estar la piel en contacto con el cloro presente la aparición de una o más ampollas o se erosione.
#2 No medir la cantidad de lejía
La lejía puede ser muy dañina en contacto con tu piel, esta irrita la piel y la deja escamosa cuando la usas con frecuencia sin guantes que te protejan de este químico. Es un error peligroso usar cantidades elevadas de lejía ya sea al limpiar ropa o tu baño. Utiliza guantes de goma para limpiar con lejía y un tapabocas para que los vapores de este químico no dañen tu piel.
#3 Usar peróxido de hidrógeno sin diluir
El peróxido de hidrógeno sirve para eliminar manchas en la ropa y desinfectar los muebles entre otros muchos objetos. Dependiendo del volumen que contenga el peróxido de hidrógeno, este puede llegar a ser dañino causando resequedad, irritando la piel e incluso puede causar mareos al ser inhalado.
Para un uso adecuado del peróxido de hidrógeno es recomendable que no lo combines con otros químicos y que lo diluyas con agua. Usa guantes de goma al usar este químico y evita todo contacto con la piel y con los ojos.
#4 Usar inadecuadamente el amoniaco
Otro de los errores peligrosos al asear la casa es el uso inadecuado del amoniaco. No debes usar amoniaco a menos que sea realmente necesario y sólo en caso de ser la última opción para limpiar. El amoniaco es un químico inflamable, irrita las mucosas y dificulta la respiración al ser inhalado, puede dañar seriamente la vista cuando este entra en contacto con tus ojos, además de quemar tu piel cuando entra en contacto con ella.
#5 Mezclar químicos
Mezclar químicos puede ser peligroso, pero más que eso si utilizas inadecuadamente los productos de limpieza, esto puede terminar fatal. Por ningún motivo es recomendable que mezcles amoniaco y cloro, tampoco con lejía y peróxido. Lo adecuado es que uses cada elemento por separado y con mucha precaución en cuidarte de no tener contacto directo con ellos.